Google se libra de una de las sanciones más duras que enfrentaba en el histórico juicio antimonopolio en Estados Unidos. Un juez federal rechazó la petición del Departamento de Justicia y varios estados que buscaban obligar a la empresa a deshacerse de Chrome, su navegador estrella, utilizado por miles de millones en todo el mundo.
El magistrado Amit Mehta, en un fallo de 230 páginas, concluyó que los demandantes “se excedieron” al solicitar la venta de activos clave como Chrome o su buscador. Sin embargo, sí prohibió a Google establecer contratos exclusivos para mantener su dominio con Search, Google Assistant y la app de IA Gemini. Además, ordenó que la compañía comparta ciertos datos de búsqueda con competidores.
El fallo no elimina la etiqueta de “monopolista” que pesa sobre Google, pero sí frena las medidas más radicales contra la compañía. El caso se suma a una serie de batallas legales en EE.UU. y Europa que buscan limitar el poder de los gigantes tecnológicos.